Uno de los rasgos culturales que nos distinguen en gastronomía es nuestro típico té gales con una variedad de recetas únicas destacándose principalmente la torta negra, tarta de crema y corintios.
El trigo fue uno de los productos emblemáticos, especialmente en el Valle 16 de Octubre, de modo que los panes caseros relfejan una historia que vale la pena conocer.
La manteca casera, igual que la tarta de crema remiten a la ganadería como parte constitutiva del trabajo en el campo.
Mientras que las tartas de frutas y los dulces de corinto o de cereza nos hablan de la riqueza de esta región.
Pero la reina de la mesa es la torta negra galesa. Como la masa no se une con leche ni crema, tiene la capacidad de conservarse durante mucho tiempo. Era ideal para los largos viajes del siglo XIX; para conservar productos que podían echarse a perder; y dio pie a tradiciones como aquella que dice que en la torta de casamiento un piso debe ser de torta negra…y que los esposos tienen que compartir una porción cada año.
Fuente de información: Turismo Trevelin
